Los interesantes narra la historia de un grupo de amigos con inquietudes artísticas a lo largo de varias décadas, desde que se conocen en la adolescencia hasta su madurez.

Es una novela entretenida y fácil de leer, pero bajo esa aparente simplicidad en la descripción de situaciones y acontecimientos comunes, encontramos una maraña de celos y de odio sobre los que se asienta su amistad. En el fondo, el relato gira en torno a un amor latente e indestructible, y a la forma correcta de interiorizar el éxito y de asumir el dolor causado por el propio fracaso. Tenemos la impresión de que la relación entre estas personas es un castillo de naipes construido sobre arenas movedizas. Todo parece real, pero con la autenticidad de un truco de magia. Y, sin embargo, nos lo creemos hasta que Meg Wolitzer va dejando puertas entreabiertas para que veamos lo que se esconde detrás de tantas cenas, cumpleaños, vacaciones compartidas…

Algunos de los protagonistas están dotados de sensibilidad artística, pero no de suficiente talento o de suerte para demostrarlo. Otros prefieren el anonimato a la gloria del triunfo y optan por una vida anodina. El personaje central, Jules, devorada por la envidia, es incapaz de hacer un reajuste de sus expectativas vitales, lo que le acarrea una gran dosis de infelicidad. Y todos, sin excepción, en su individualidad y como grupo, resultan "interesantes".

La novela ha obtenido buenas críticas en Estados Unidos y una gran acogida por parte de los lectores.