El título de esta película, hace referencia a la fecha en la que se celebran las primarias estadounidenses en Ohio y que se interpretan como decisivas en lo que sucederá después en las elecciones generales.

Sin profundizar en la política norteamericana, el director, George Clooney, partiendo de una obra de teatro, nos enseña las bambalinas de una campaña electoral en el seno del partido demócrata, semanas antes de las primarias. George Clooney también se reserva un papel, el del candidato demócrata, para ceder el protagonismo a Ryan Gosling, en una sobria y eficaz interpretación de un joven director de campaña, rodeado de otros secundarios de lujo como Paul Giamatti y Philip Seymour Hoffman.

La trama, no sin interés, será la excusa para mostrarnos las consecuencias de un hecho puntual en unos personajes acostumbrados a moverse en la élite política. Superando la idea de que el poder corrompe, lo que nos desvela este film, además de la hipocresía que parece exigirse en el mundo de la política, es que el sistema genera monstruos y cada vez más deprisa.

Nominada, entre otros premios, al Óscar a mejor guión adaptado en 2012, es una película que al espectador europeo, menos acostumbrado a ver la maquinaria de los partidos políticos, le resultará interesante y entretenida.